viernes, julio 29, 2005

No creo que algún día llegue el momento de conjugar el verbo olvidar u odiar junto a tu nombre, no olvido aquella niña que en la primaria me hacia suspirar cada vez que pasaba al pizarrón o cuando escuchaba su nombre, que estaba profundamente enamorado de ella y ella ni lo sabia, menos voy a olvidar a la mujer que me a dado todo sin pedir nada a cambio, ¿Como voy a olvidar a quien me a dado lo que nunca nadie antes me había dado?

No odio a mi hermana que a tratado de hacerme la vida difícil durante varios años, menos voy a odiar a la mujer que me hizo ver el mundo de otra forma, quien me hizo levantarme de una caída de 57 pisos, no puedo odiar a la mujer que me hizo creer en mi creyendo en ella.

Estos días de lluvia me ponen melancólico, suspirante, ajeno. Cuando el cielo se nubla el sol dentro de mí comienza a brillar y veo las nubes con amor y odio. Pienso demasiado, a media conversación se me viene a la mente una frase con la puedo hacer sentir bien a la otra persona y cuando la voy a decir, me la trago cual ostia, con los ojos cerrados, mirando el suelo y murmurando palabras que no se que significan y cuando vuelvo, no recuerdo ni de que estaba hablando.

Las nubes me hacen pensar en mi Padre, en donde estará, si sabrá que estoy bien, si tiene idea de lo tanto que extraño su presencia y palabras. Si sabe que la lluvia me recuerda el día que falleció y me fui a caminar por las calles aquella madrugada que por mas gotas de lluvia que me caían sobre el cuerpo, no me alcanzaban a mojar tanto como las lagrimas que brotaban por mis ojos, y por mas fuerte que tronara el cielo, no lograban callar mis gritos de dolor. Quisiera saber si lo sabe, si se da cuenta de todo lo mal que la e pasado sin el, que me da tanto gusto acordarme de aquella cercana navidad que con el corazón en la mano le di un abraso, un beso y le dije “te quiero un chingo viejo”-nunca lo había hecho- y el me respondió igual, acordarme que le dijo a toda la familia, anduvo presumiendo con sus hermanos que su hijo, el mayor, el que ya se creía adulto, lo había abrasado, besado y sin esperar nada a cambio ni tener una noticia decepcionante, sin tono de chantaje, le había dicho “te quiero”. ¿Sabrá que lo extraño?

No se mi padre tendrá idea de lo agradecido que estoy por haberme mandado desde donde está a esa mujer que me a cambiado la vida, que me cobija en días lluviosos y me a hecho amarla mas de lo que ella lo hace. Por eso lo escribo, por si algún día llega a pasar por aquí, lo lea y se de cuenta que lo extraño, que lo pienso y recuerdo bien, que sigo sus consejos y que encontré a la mujer que el me había jurado alguna vez que llegaría.

2 Comments:

At 1:24 p.m., Blogger Mayoli said...

aaaaaaaiiiiiiiiiiiiiiiiiiii
me chocaaaaaa que escribas taannn lindooooo!!!!!
te lo juro que se me hizo un nudo en la garganta kiki :S:(

te amooo!!!!!
te quiero con todo mi corazon!!

gracias por escribir tan llegador!
y gracias por estar conmigo siempre
:******************************************

 
At 7:59 p.m., Blogger kiki said...

:$

 

Publicar un comentario

<< Home