Abrir los ojos es difícil, mas cuando la niebla cubre el panorama…

Nunca vi discutir fuerte a mis padres, siempre alguien cedía, existía algo como acuerdo de que si alguien no estaba de acuerdo decía: “NO”. Y ahí quedaba o si había que alegar, solo bastaba decir, pero esta mal que sea “NO”, tiene que ser “SI” y punto. Y ahí quedaba todo y no, mi Jefazo no era un ogro que nadie le podía decir nada, tenia su lado y se podía llegar a convencer de cualquier cosas a menos que el te convenciera de lo contrario y sin gritar. Creo que solo vi dos discusiones entre ellos, una no me acuerdo bien porque fue pero estuvo buena, la otra fue cuando mi Jefazo ya había perdido la vista y la diabetes ya lo tenia muy jodido, mi jefita decidió ponerse a dieta y cuando se lo dijo a mi jefazo andaba muy borracho y lo tomo por el lado de que mi madre quería adelgazar para agradarle a algún doctor de donde trabajaba ya que el ya no cumplía en ningún ámbito como esposo, se hizo un pancho, un amigo de mi jefazo le puso el alto y se pusieron a platicar, fue una gran discusión, yo no estaba, este amigo de mi jefazo me lo platico a los días que el falleció, a mi me agüito mucho, no entienda como mi jefe se pudo poner así, el no era así, pero bueno, el alcohol, la enfermedad, no ver, después entendí.

Simón, si, estoy triste y mucho, y no necesito que me digan cosas bonitas ni que me digan hay ya paso, o tómalo con calma, no necesito aliento, necesitan perder a su padre o a alguien muy querido para sentir lo que siento, para saber que las palabras a veces no sirven pa’ni madres!